No estoy aquí para hablar de religiones, ni de opiniones diferentes. Hoy quiero hablar de Dios, el Dios compartido. Dios para todos, sin importar su denominación o la religión a la que pertenecemos. Estoy aquí para hablar de las funciones que El tiene en nuestras vidas.
Dios es todopoderoso. Es decir que El lo sabe y lo puede todo. Gobierna nuestro camino y nos escoge. Nos pone a prueba. Dios aprieta, pero no ahorca. Nunca te dará más de lo que puedas llevar. Cada uno lleva la cruz que le toca y aunque nos quejamos, recordemos que, las personas de al lado puede que lleven una cruz doble en comparación con la nuestra. Nos quejaríamos aún si tuvieramos seguridad de eso?
Dios, al que muchas veces negamos o culpamos de lo que nos sucede está siempre con nosotros. Siempre que se lo pedimos. E incluso cuando no lo vemos o no lo llamamos, El está ahí. Y da más de lo que uno puede pensarlo. Muchos dicen: "Dios no me quiere, por qué me da estas desgracias?" o "Es culpa de Dios, no está a mi lado cuando más lo necesito" Equivocado. Dios pone a prueba a los que ama. Siempre. Ten fe en que El sabe por qué hace las cosas. Raro está que cuando nos va bien, casi nunca sabemos agradecerle. No te haces tú el bien, te lo da El, porque te lo mereces. Todo lo que recibas será de sus manos. Dios ha sufrido por nosotros, a caso, no estamos hechos de la misma masa? No estamos sufriendo para conseguir realmente lo que queremos? El es un luchador, un triunfador y nos está enseñando a ser iguales a El.
Dios es bondad, amor, paz, alegría, penas y fuerza... Dios es el ejemplo que nos ha enseñado que nada en la vida es imposible. Dios te escucha y te guía aunque no lo veas. Dios te ama. El no te da migajas como lo hace la gente, El te lo da todo y espera todo de ti.
María, Fecioara Maria (en rumano), la madre de Jesús tambien tiene distintos nombres (La Virgen del Carmen, Nuestra Señora de Guadalupe, Nuestra Señora de Coromoto) es la Madre Suprema. Todos, buenos o malos, somos sus hijos. Ella nos ama y es una importante conexión entre Dios y nosotros. Ella apiada el corazón de Jesús, ella reza por nosotros infinitamente sin importarle el estatuto que cada uno tenemos.
Ella llora de tristeza por la maldad que existe en el mundo y de alegría porque tanta gente pone su fe en ella.En su infinita bondad escucha y reza por nosotros. La Virgen María es única. Pon tu fe en ella, deja que te guie, acude a ella siempre que tengas una pena y siempre que lo sientas. No tienes que estar mal para hablarle. Ella te escucha. Escucha las palabras sinceras, lo que viene del corazón. Jamás te desampara.Ella está en todos lados.
Si lloras, te limpiará las lágrimas, si sufres te dará consuelo. Si estás perdido, te guiará. Si la buscas, estará por ti.Si sientes que te acarician la cabeza cuando está mal, es Ella. Siéntela. Ella está a tu lado.
Y no hay palabras que llenen mi entrada o un libro entero para hablar de ella.
Mucho de lo que hago y lo que soy se lo debo a Ella y a Dios. Al Cielo.
Gracias. Habia sentido la necesidad de compartir esto, aunque ahora acabando mis palabras me parecen demasiado pequeñas.